Reforzar la salud intestinal es una de las formas más efectivas para prevenir enfermedades y mejorar tu calidad de vida. La salud intestinal implica la digestión y absorción de los alimentos y a su vez la ausencia de enfermedades gastrointestinales. Mantener un microbiota equilibrada junto con una barrera intestinal reforzada, te proporciona un sistema inmunitario eficiente y un estado de bienestar general.
Cuando hablamos de curar los intestinos nos referimos a aliviar síntomas inflamatorios, estreñimiento, gases, dolor de estómago, diarrea y colon irritable. También síntomas menos comunes como la lengua blanca, cansancio extremo, piel seca y dolor en los riñones y en el hígado.
Si padeces alguno de estos síntomas, existen algunos ingredientes naturales que te ayudaran a mejorar tu salud intestinal y a estimular la limpieza del colon. En este artículo queremos hablarte sobre sus propiedades y cómo te pueden ayudar a curar tus intestinos.
Malva
La malva es una planta medicinal con propiedades antinflamatorias que ayuda a combatir los dolores de estómago y el estreñimiento, ya que facilita el tránsito intestinal como un laxante natural.
Preparar una infusión con hojas de malva mejora la digestión, evitando que el intestino se hinche, alivia la irritación estomacal y la inflamación intestinal.
Psyllium Husk
Este ingrediente es catalogado como una joya intestinal y tiene su origen en la semilla Plantago Ovata. Para incluirla en nuestra alimentación se suele agregar en el yogurt o en bebidas licuadas.
El Psyllium Husk es rico en mucílago, un componente que atrapa el colesterol malo y evita que este se traslade a la sangre, además de ayudar a regular el tránsito intestinal.
Contiene un alto porcentaje de fibra que ayuda en la pérdida de peso. Tiene una alta capacidad saciante, con lo que se controla el apetito y evita también que comamos entre horas. Además, reduce los triglicéridos en la sangre, la presión arterial y disminuye la posibilidad de sufrir enfermedades cardíacas.
Linaza
La linaza posee enzimas digestivas que ayudan a regular el tránsito intestinal favoreciendo la absorción de nutrientes, mejorando el proceso de digestión y reforzando la salud del intestino y su microbiota. Gracias a su poder antiinflamatorio previene el desarrollo de diferentes enfermedades en el sistema digestivo.
Al tener un alto contenido de fibra, la linaza ayuda a depurar el organismo facilitando la eliminación de toxinas que se acumulan en el cuerpo, previniendo o minimizando el estreñimiento y favoreciendo el control del peso.
Aloe Vera
El Aloe vera es ideal para eliminar la acumulación fecal tóxica almacenada durante mucho tiempo. Ayuda a reconstruir las células del colon a la vez que limpia el intestino, elimina el exceso de flora negativa como la levadura y las bacterias y facilita la absorción de nutrientes en los alimentos.
Además, el Aloe Vera ayuda a evitar problemas digestivos derivados del estreñimiento y gracias a sus aminoácidos curativos se regulan muchas funciones del intestino y del estómago.
Raíz de Regaliz
Al tratarse de una hierba antiinflamatoria, antiespasmódica y antiácida previene la pesadez de estómago, reduce la flatulencia y evita la indigestión. También es recomendada para problemas intestinales como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn.
Además, el regaliz es utilizado para aliviar el reflujo gastroesofágico, para combatir la acidez y los espasmos gastrointestinales y disminuir la pesadez y las flatulencias después de una comida copiosa.
Debido a su intensa función antiinflamatoria, el regaliz es un excelente recurso de herbolario para la úlcera gástrica. En combinación con determinadas plantas medicinales de efecto laxante ayuda a reducir el estreñimiento.
Probióticos
Los probióticos ejercen distintos efectos sobre la salud y muchos de ellos tienen lugar a través de la flora intestinal.
Los probióticos contribuyen a mantener y regenerar una flora microbiana adecuada tras el uso de antibióticos y a preservar las barreras naturales del tracto digestivo. Además, ayudan a prevenir diarreas y a reducir su duración y severidad.
También se usan en la prevención y el tratamiento del síndrome de colon irritable, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn y de las infecciones por Helicobacter pylori. Es habitual su uso para prevenir y tratar el estreñimiento, los cólicos del lactante o para prevenir resfriados.